jueves, 13 de junio de 2013

CARACTERÍSTICAS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL

CARACTERÍSTICAS DE LA II GUERRA MUNDIAL

1.- PLANIFICADA CIENTÍFICAMENTE
                La ciencia, la técnica y la economía se pusieron al servicio de la guerra. Alemania y Japón habían subordinado sus recursos durante los años treinta a la creación de una estructura económica para la guerra de ahí que a los inicios de la guerra la superioridad militar germana fuera arrolladora.
                Durante el conflicto nuevos aportes científicos permitieron la construcción de nuevas armas de guerra: el radar, por parte británica; los sistemas dirigidos, las bombas volantes alemanas (V-1 y V-2) ; la energía atómica por parte de los Estados Unidos; el desarrollo de la aviación a gran escala.

2.- PLANIFICACIÓN DE LA ESTRATEGIA MILITAR
                El Alto Estado Mayor alemán desde 1934 había planificado una estrategia militar ofensiva.
                Así, diseñó la guerra relámpago, la blitxkrieg, basada en la utilización del carro de combate como instrumento de combate autónomo y no como mero auxiliar de la infantería. Una estrategia muy válida para las llanuras de Europa central y oriental, que permitió doblegar la resistencia del ejército tradicional polaco en pocos días.

3.- LOS ESPACIOS
                La Segunda Guerra Mundial tuvo como espacios el frente, la fábrica, el laboratorio y la retaguardia. Esta última de gran importancia. La ruptura de la moral de la retaguardia se valoró como un instrumento decisivo para la victoria. Cuando al final de la guerra se estableció el balance de víctimas, un porcentaje próximo al 40 % correspondió a la población civil. el ejemplo más claro de esta guerra psicológica fueron los bombardeos masivos y la violación de la Convención de Ginebra respecto de la población civil de los países ocupados.

4.- LOS MOVIMIENTOS DE RESISTENCIA
                Frente al colaboracionismo y a la ocupación alemana pronto surgieron los movimientos de resistencia. Hasta 1943 su radio de acción fue muy limitado, pero a partir de las derrotas alemanas se extendió su influencia. En ellos participaron comunistas, socialistas y cristianos progresistas, que entorpecieron la logística militar de la ocupación o se enfrentaron decisivamente. La resistencia francesa se estructuró en un primer momento alrededor de la figura del general De Gaulle, que en junio de 1940 se negó a aceptar el armisticio con los alemanes. En torno a De Gaulle se aglutinaron militares comprometidos con el Frente Popular de 1936. El papel de la resistencia francesa alcanzó su máximo exponente con el desembarco aliado en la playas de Normandía en junio de 1944. Especial importancia tuvo el movimiento guerrillero yugoslavo, dirigido por Tito, al convertir la zona de los Balcanes en un frente de guerra permanente.

5.- LOS CAMPOS DE CONCENTRACIÓN
Los primeros fueron utilizados para los políticos socialistas, comunistas y demócratas, pero muy pronto se incorporaran grupos étnicos y homosexuales.
Se intensificaron durante la guerra.
Las técnicas de eliminación dentro del campo fueron variadas se llegó a eliminar diariamente a unas 10.000 personas (momentos de la "Solución Final")
Su objetivo final sería la limpieza étnica.
Las características en el campo de concentración podemos destacar: los muros, alambradas electrificadas, torres de vigías, barracones separados de poblaciones, duras condiciones de trabajo, hacinamiento, ....


ESTE CURSO HASTA AQUÍ.
11.- EL CONCEPTO DE MUNDIAL
La Segunda Guerra Mundial puede decirse que sí tuvo un verdadero alcance mundial, pues las operaciones se desarrollaron simultáneamente en el Atlántico, el Pacífico, el Índico, el Mediterráneo, etc. Tanto Europa, como Asia y África, fueron escenarios de grandes batallas. También habría que puntualizar que se convierte en mundial a partir de 1941.
En la Primera Guerra Mundial la mayor parte de las batallas tuvieron lugar en el continente europeo, 

12.- UNA GUERRA TOTAL
Las naciones enfrentadas buscaron el absoluto aniquilamiento del enemigo, contraviniendo abiertamente las cláusulas humanitarias de los tratados internacionales. Desarrollaron una guerra total y dedicaron ingentes recursos materiales y humanos a la consecución de la victoria.

13.- UNA ECONOMÍA DE GUERRA
La guerra alteró de manera determinante la marcha de la economía mundial. Los países beligerantes hubieron de adaptar su sistema productivo y recursos al uso militar.

La industria pesada sustituyó en importancia a la de bienes de consumo. La siderúrgica adquirió gran relieve, al ser imprescindible en la producción de acero y la fabricación de carros de combate, piezas de artillería, aviones, así como todo tipo de vehículos. Otro tanto sucedió con la industria química, esencial para la producción de explosivos.
Los gobiernos centralizaron y controlaron férreamente el sistema productivo, con el consiguiente menoscabo de la iniciativa privada de los tiempos de paz.

Las necesidades de mano de obra fueron paliadas por la incorporación masiva de mujeres ancianos y niños al sistema productivo. Las jornadas laborales se convirtieron en muchos casos en extenuantes, viéndose incentivadas las horas extraordinarias trabajadas durante los días de descanso y en períodos nocturnos. La población civil fue víctima de duros racionamientos de productos alimenticios y carburantes, lo que alentó el florecimiento del mercado negro.

En Alemania las rápidas conquistas alcanzadas durante la primera fase de la guerra, posibilitaron el desarrollo de una economía sustentada en la explotación de los recursos materiales y humanos de los países ocupados. Sin embargo, a partir de 1942, tras el descalabro sufrido en Rusia y la pérdida del control de vastos territorios, el régimen nazi se vio obligado a compensar la falta de recursos recurriendo a la fabricación de componentes artificiales. Fue el caso del combustible, auténtico talón de Aquiles de las unidades acorazadas y motorizadas de la Wehrmacht. Durante las campañas en el norte de África los carros de combate y demás vehículos padecieron una gran escasez de gasolina; la situación fue aún peor durante la Contraofensiva de las Ardenas de 1945. 

Los aliados, que contaban con una mayor extensión y variedad territorial, no padecieron las mismas dificultades que Alemania y Japón. El enorme potencial industrial estadounidense, unido a las importantes reservas petrolíferas y de materias primas controladas por el Imperio británico,les otorgó una gran ventaja logística.

La Unión soviética, inmersa en una economía profundamente planificada, no encontró especial dificultad en adaptarse a la economía de guerra. El Plan Quinquenal de 1938 había hecho hincapié en ello. Destacable fue el esfuerzo llevado a cabo por los rusos, que lograron salvar gran parte su sistema productivo, sustrayéndolo al alcance del ejército alemán, mediante el traslado de fábricas completas al este de los Urales, desde donde siguieron suministrando armas y pertrechos al Ejército Rojo.

14.- UNA GUERRA TOTAL
Frente a conflictos anteriores, la Segunda Guerra Mundial se caracterizó por ser "total". En ella no se buscó la rendición del enemigo, más bien su absoluta aniquilación. Participaron en ella no solo militares, sino también civiles. Los alemanes, en 1945, cuando la derrota estaba próxima, movilizaron incluso niños procedentes de las Juventudes Hitlerianas, que contaban escasamente 14 años. Algo similar ocurrió con los ancianos, empleados como combatientes durante la Batalla de Berlín. 

El conflicto adquirió desde sus inicios una fuerte condición ideológica y moral: se trataba de una guerra entre potencias que encarnaban el bien y el mal, lo que sirvió para justificar el uso de medios implacables, de cuestionable moralidad . Tal ocurrió con los bombardeos en alfombra llevados a cabo por los aliados sobre las indefensas ciudades alemanas, con el objetivo de aterrorizar a la población civil y forzar la capitulación de III Reich. O con el empleo de los dos ingenios atómicos contra Japón, cuando estaba ya prácticamente derrotado.

15.- EL GUETTO (GUETO)











jueves, 6 de junio de 2013

LA EXPANSIÓN DE ALEMANIA


LOS VIRAJES HACIA LA GUERRA

CARACTERÍSTICAS
                - Hitler no ocultó sus intenciones expansionistas en ningún momento. Entre 1937 y 1939 se produjo una secuencia ininterrumpida de éxitos de la política expansionista nazi ante la impotencia de las democracias occidentales.
                - En poco más de un año había dado el primer paso en su gran diseño hacia la expansión territorial de Alemania.
                - En febrero de 1938 Hitler se autonombró comandante en jefe del ejército.
                - A partir de 1937 el rearme alemán es un hecho, con un gran empuje en la fabricación de armamento que dio seguridad a las reivindicaciones.
                - El proceso de nazificación del Estado alemán fue importante y sobretodo el relevo en las cúpulas del ejercito de los viejos generales prusianos por los generales nazis.
                - Francia asumió de hecho una inferioridad militar con respecto a Alemania que en 1937 no era todavía decisiva.
                - La política de apaciguamiento de Francia[3] y Gran Bretaña fue interpretada por la Alemania nazi como una carta blanca a los planes expansionista y militaristas de Hitler.
                - Esta Alemania que se engulle a sus vecinos se realizó por medio de pactos diplomáticos o por la ocupación militar.

SARRE
                En marzo de 1935, esta vez por plebiscito, se produjo la integración en el Reich de la provincia del Sarre, que estaba bajo control internacional y, en la práctica, de Francia, desde los Acuerdos de París de 1919

RENANIA
                En 1936 el gobierno de Berlín anunciaba que dejaría de reconocer todas las disposiciones militares de los acuerdos de posguerra. Como primera medida las tropas alemanas entraron en la hasta entonces desmilitarizada Renania, al tiempo que se hacía público su plan de rearme general que en realidad ya había comenzado a aplicar en secreto. Todas estas medidas de “restauración de la dignidad alemana” le granjearon inmensa popularidad.

AUSTRIA
                El primer intento de anexión de Austria por medio de un golpe de Estado nazi en Viena fracasó en julio de 1934, pese a la muerte en atentado del canciller y nacionalista-católico austríaco E. Dollfuss, que funcionaba con un régimen político dictatorial y más proclive al fascismo italiano.
                Mussolini se había convertido en garante de la independencia austríaca, en julio de 1934 envió tropas italianas al Brennero y frenó el intento de “Anschluss”.
                A partir de entonces se asistió a un incremento de la influencia de los nazis austriacos que desembocó en el Anschluss.
                El 11 de marzo de 1938 el Ejército alemán cruzaba la frontera entre los dos países y avanzaba entre los vítores entusiastas de gran parte de la población hacia Viena. Se había formado el “Anschluss”, el 13 de marzo de 1938, sin grandes repercusiones exteriores, aunque las cláusulas del Tratado de Versalles lo prohibían.
                Entre 1934 y 1938 la situación en Austria había cambiado: - Italia, el antiguo protector de Austria, había formado ya con Alemania el eje Roma-Berlín (oct., 1936), - Austria dejaba de existir como Estado y volvía de regreso al imperio, según la propaganda nazi, - para una mayoría de los austríacos, que había visto desaparecer el trono de Viena y reducido su país a un pequeño Estado, para muchos inviable y en constante agitación política y penuria económica, celebró la anexión con entusiasmo.


CHECOSLOVAQUIA
                Después de Austria la marcha alemana se centro en Checoslovaquia.
a.- SUDETES
                Franja de territorio entre Bohemia y Moravia poblada mayoritariamente por alemanes (aquí vivían mas de tres millones de alemanes) que se sentían crónicamente insatisfechos por haber pasado de ser mayoría en el antiguo imperio de Viena a minoría en el nuevo estado checoslovaco, de ahí el resentimiento de la población contra el dictado de Versalles. La propaganda nazi no dejaba de clamar contra la supuesta persecución de los alemanes por parte de Checoslovaquia. La población alemana de los Sudetes se había empobrecido enormemente justo cuando el hecho de que Hitler hubiera ascendido al poder en Alemania hizo que la propaganda nazi fuese desbordante.
                Hitler exige a principios de septiembre de 1938 la entrega de los Sudetes y su incorporación al Reich bajo amenaza de guerra. El gobierno de Praga pidió ayuda a sus aliados occidentales, Gran Bretaña y Francia.
                En la Conferencia de Munich[4], celebrada el 29 y 30 de septiembre, Francia y Gran Bretaña legitimaron la incorporación a Alemania de todas las regiones checas pobladas al menos con un 50 % de alemanes, que pasarán a la historia como el gran ejemplo del entreguismo de las democracias a la tiranía nazi. La paz[5] parecía salvaguardada costa de la viabilidad del Estado checoslovaco.

b.- BOHEMIA-MORAVIA
                Las democracias saldrían de su error cuando en marzo de 1939 Hitler invadió Checoslovaquia que supuso la desmembración de este estado europeo. La parte checa se transformó en el protectorado alemán de Bohemia y Moravia, mientras que Eslovaquia obtuvo una independencia relativa como Estado subordinado a Berlín. En Londres y París se comenzaba a ver la guerra como algo inevitable a corto o medio plazo.
                En estos momentos Mussolini invadió Albania.

EXPANSIÓN HACIA HUNGRÍA, BULGARIA, RUMANIA Y LOS BALCANES.
                Hitler realizó con estos países acuerdos económicos destinados a asegurar la subordinación de los países de la Europa oriental. En estos países funcionaban dictaduras nacionalistas que podían sentirse próximas al nazismo, como era el caso de Hungría, Bulgaria y Rumania. La depresión económica de los años treinta y el subsiguiente nacionalismo económico habían cerrado para muchos de estos países el mercado mundial. Como resultado se produjo el acercamiento a Alemania: los mercados alemanes garantizaban las exportaciones y la tecnología necesaria para el funcionamiento de sus economías. Las relaciones de estos países con las democracias occidentales se enfriaron producto de la crisis económica y el acercamiento a Alemania no fue cuestionado ya que no había reivindicaciones territoriales por parte de Alemania sino simplemente acuerdos económicos.

OTROS

LAS INICIATIVAS ITALIANAS
                Invasión de Albania.
                 Italia inició una nueva aventura colonial en Abisinia en 1935.
º              Africa Oriental.

LA COLABORACIÓN ENTRE LOS FASCISMOS
                Octubre de 1936 Italia y Alemania firmaron un pacto, el Eje Roma-Barlín
                Noviembre de 1936 Pacto anti-Komintern del Eje con Japón.

EL PACTO GERMANO-SOVIETICO

EL EXPANSIONISMO Y MILITARISMO JAPONES

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA
                Se ha considerado por muchos como el primer capítulo de la Segunda Guerra Mundial por los enfrentamientos ideológicos que produjo, por las conclusiones políticas y bélicas a que dio lugar y porque coadyuvó a formalizar los bloques enfrentados desde 1939.

LA GUERRA CHINO-JAPONESA.












[1] Esta policía secreta del Estado se creó en abril de 1933. La jefatura fue para el jefe de las SS Heinrich Himmler.
[2] Los campos de concentración fueron creados con la finalidad de reeducar a los descarriados por el marxismo “nada más necesario que la intervención contra los seductores, los agitadores y sus mismos jefes”. A ellos fueron enviados millares de funcionarios de los partidos comunista y socialista”
[3] Los graves disturbios sociales en Francia en 1934 o la grave crisis social y política de Gran Bretaña favorecían a Hitler.
[4] En esta conferencia participaron: Hitler, Mussolini, el premier británico Neville Chamberlain y el francés Daladier
[5] Frase inmortal por lo equivocada de N. Camberlain a su regreso a Londres: “ Hemos asegurado en Munich la paz de nuestros días”.

NAZIFICACIÓN DE ALEMANIA



a.- EL ENFRENTAMIENTO Y LA SEPARACIÓN.
Nos referimos a enfrentamiento y la separación de Alemania de las relaciones internacionales. Hechos, pues, que marcaron ese enfrentamiento o separación con el resto de países principalmente europeos.

1.- Exigir la rectificación del Tratado de Versalles.
2.- Negativa a pagar las reparaciones de guerra.
3.- Retirada de la Sociedad de Naciones, 1933.
4.- Reingreso del Sarre al III Reich, 1935.
5.- Servicio militar obligatorio.


b.- ELIMINACIÓN DE LOS ADVERSARIO O ENEMIGOS Y EL CAMINO A LA DICTADURA.

1.- Prohibición de la prensa y reunión de la oposición
2.- Incendio del Reichstag, febrero de 1933.
3.- Supresión de las libertades individuales, incluida la defensa de las detenciones.
4.- Restablecimiento de la pena de muerte.
5.- Hitler plenos poderes, agosto de 1934. Führer.
6.- La “noche de los cuchillos largos”, 1934. Eliminación de las SA
7.- La “noche de los cristales rotos”, 1938, contra los judíos.


c.- NAZISMO, RÉGIMEN TOTALITARIO
                En sus métodos, el gobierno de los nazis era totalitario. Despreciaban la libertad individual, y perseguían un control total sobre las vidas de sus conciudadanos.

1.- La depuración de la Administración.
                Desde febrero de 1933, los nazis accedieron a los puestos clave del aparato del Estado, apoderándose de la administración. La depuración de la función pública les aseguró la docilidad del funcionario, que tenía la obligación de adscribirse al partido. Muchos funcionarios habían sido expulsados al aplicar la Ley de abril de 1933, que permitía licenciar a los funcionarios por razones políticas o raciales.

2.- La política racista.
                La política racista de Hitler se orientó en primer lugar hacia la comunidad judía, que desde 1933 no dejó de sufrir persecuciones sistemáticas. Hitler comenzó muy pronto a hacer de su antisemitismo una horrenda realidad. Después de ser excluidos de la función pública por las leyes de abril de 1933, a partir de 1935 los judíos no podían ser ciudadanos alemanes ni casarse con arios.
                Millares de judíos perdieron su trabajo y millares de ellos, especialmente los de mayor nivel cultural, emigraron. Pero los millones que permanecieron en Alemania padecieron una persecución creciente a medida que pasaban los años. Los ataques a sus propiedades fueron seguidos por medidas vejatorias (llevar la estrella amarilla, prohibición de entrar en determinados lugares públicos,...) y de violencias personales; eventualmente, eran conducidos a los campos de concentración.
                Ver apartado de la noche de los cristales rotos.
                Con la guerra se intensificaron las persecuciones, hasta llegar al más monstruoso genocidio de la historia, la llamada, la Solución final, que supuso el exterminio de millones de judíos alemanes y extranjeros. La Solución final se dicidió en la Conferencia de Wannsee en enero de 1942.

3.- La pureza de la raza
                Hitler decidió asimismo, buscando la pureza racial, desembarazarse de los alemanes “degenerados” que, según él, sobrecargaban hospicios y hospitales. Dio orden de esterilizar a la fuerza a los enfermos mentales; entre 1940 y 1941, 70.000 enfermos, inválidos y viejos fueron sacrificados en las cámaras de gas.

d.- La enseñanza.
                La juventud y la familia fueron objetivos prioritarios de la propaganda nazi. La enseñanza debía forjar los caracteres de los jóvenes alemanes e inculcarles el ideario nacionalsocialista. Esa acción, fuertemente controlado por el Partido por medio de la liga nazi de enseñantes, sería continuada por organizaciones juveniles como las Juventudes Hitlerianas, que tenían por objeto formar hombres obedientes, bien entrenados militar y físicamente, y totalmente devotos del régimen.

4.- La policía
                El aparato policial fue dotado de un poder temible. Las SA vieron su papel reducido en favor de las SS, que constituían un verdadero ejército de 200.000 hombres, bajo las órdenes de Heinrich Himmler, que dominaba también la policía secreta del Estado: La Gestapo[1]. Los métodos que utilizaban eran de una ferocidad inaudita: torturas, asesinatos, “suicidios” organizados, campos de concentración[2], etc. En 1939, había un millón de deportados en los campos, que eran ya cien, entre los cuales los más tristemente célebres eran, en esa fecha, Dachau y Buchenwald.


SÍNTESIS

a.- La depuración de la Administración.
b.- La política racista.
c.- La pureza de la raza
d.- La enseñanza.
e.- La policía






[1] Esta policía secreta del Estado se creó en abril de 1933. La jefatura fue para el jefe de las SS Heinrich Himmler.
[2] Los campos de concentración fueron creados con la finalidad de reeducar a los descarriados por el marxismo “nada más necesario que la intervención contra los seductores, los agitadores y sus mismos jefes”. A ellos fueron enviados millares de funcionarios de los partidos comunista y socialista”

CARACTERÍSTICAS DEL FACISMO


GRANDES CARACTERÍSTICAS DEL FASCISMO

A.- Ideología de carácter globalizador, aplicable a todos los aspectos de la existencia humana, y con una concepción milenarista que aspira a la creación de un hombre nuevo.

B.- Omnipotencia del Estado.
Todo en el Estado, nada fuera del Estado”, sentencia Mussolini.
a.- Estado e individuo. Sumisión del individuo al Estado. Su formula será todo para el Estado, los individuos están totalmente subordinados al Estado, subordinan el individualismo y la libertad a la omnipotencia del Estado. Establece como objetivo del individuo el servicio al Estado. Quedan fuera, pues, la protección de los derechos del individuo que establece el sistema democrático.
b.- Estado y poderes políticos. El Estado no tolera la separación ni el contrapeso de los poderes, que es en cambio el símbolo de los Estados democráticos. En el campo político se suprime toda oposición, a la que se considera sólo como una perturbación para el buen gobierno. El único control posible al ejercicio del poder sólo se puede realizar desde organizaciones intermedias o corporaciones.
c.- Estado e intelectualidad. En el campo intelectual el Estado monopoliza la verdad y la propaganda, al tiempo que se rechaza cualquier crítica.

C.- Existencia de partido único, fuertemente jerarquizado en torno a un jefe (“duce”, “führer”, “conducator”, “caudillo”) que ejerce el monopolio de la representación política. Niega, pues, el “Estado de partidos”, consagrado en las constituciones de la época de entreguerras.

D.- Eliminación de la oposición mediante métodos de violencia física o psíquica, con expresiones extremas como el antisemitismo.

E.- Monopolio de los medios de comunicación de masas y utilización de la propaganda como medio de lograr el encuadramiento político de la población en torno a conceptos como “patria”, “raza” o “jefe”.

F.- Control centralizado de la economía, con expansión de la iniciativa pública, intervencionismo del Estado en los conflictos laborales y defensa de la autarquía como modelo económico.

G.- Mitificación de los valores nacionales y desarrollo de una ideología del darwinismo social que permite sostener la desigualdad cultural y étnica entre los pueblos.

H.- Desconfianza de la razón. La tradición racionalista es uno de los más decisivos legados de Grecia a Occidente; el fascismo rechaza esta tradición y adopta posturas antirracionalistas, desconfiando de la razón y exaltando los elementos irracionales de la conducta, los sentimientos intensos, el fanatismo. En esta línea irracionalista se desenvuelven los dogmas, las ideas indiscutibles, como la superioridad de la raza o del jefe. En contraposición, la democracia estima que ningún tema debe dejar de ser discutido. El tabú, lo que debe aceptarse sin discusión, lo que no puede ser sometido a análisis, es rasgo peculiar de los regímenes totalitarios.




miércoles, 22 de mayo de 2013

LA REPÚBLICA DE WEIMAR


LA REPÚBLICA DE WEIMAR.

Tiempo histórico: de 1919 a 1933.

La abdicación del Kaiser Guillermo II, el fin de la guerra y la desaparición del II Reich desembocaron en la creación de la República de Weimar (denominada así por la localidad donde se instituyó). Duraría unos 15 años que transcurrieron en su mayor parte bajo constantes tensiones económicas, sociales y políticas. Dos fueron sus presidentes: Ebert (1918-1925) e Hindenburg (1925-1934).
La República de Weimar era hija de la derrota y de la revolución, y se impuso con dificultad en un país en el que las elecciones democráticas estaban débilmente arraigadas antes de 1914. Tuvo que soportar desde su fundación oposiciones irreductibles, tanto a la derecha como a la izquierda, y tuvo que afrontar en diez años las dos crisis económicas más graves de la Alemania moderna: la inflación galopante de 1923 y la crisis mundial de 1929, que tuvo unas repercusiones nunca vistas en Alemania.

La República se organizó sobre la base de la Constitución de 1919, proclamada en Weimar, una de las más progresistas de la época.
Establecía un parlamento de dos Cámaras y un régimen federal (los länder o 17 Estados) de carácter presidencialista que otorgaba al presidente, elegido por sufragio universal (masculino y femenino), especiales poderes para gobernar mediante decretos, en casos de emergencia
La Constitución sancionaba, por otra parte, una serie de libertades y derechos de carácter social y económico que constituyeron un claro precedente al llamado “Estado de bienestar”.


La República de Weimar se enfrentó a serias dificultades:

a.- La primera de ellas fue la frágil base política sobre la que se fundó. Fueron los socialdemócratas, apoyados por los liberales y el centro católico, los que sacaron adelante la Constitución, en tanto que la izquierda (comunistas y otros grupos), así como la extrema derecha (nazis) la atacaron desde posturas contrapuestas.
A medida que la situación económica y social se fue deteriorando, liberales y católicos fueron retirando su apoyo a las instituciones republicanas, en tanto los nazis incrementaban su fuerza.


b.- La segunda dificultad que hubieron de encarar los gobiernos republicanos, especialmente bajo el mandato del presidente Ebert, fue la cuestión de las indemnizaciones que Alemania estaba obligada a pagar a los vencedores de la Gran Guerra (unos 132.000 millones de marcos-oro a pagar en 30 años).
La interrupción del pago de esas cantidades dio lugar a la invasión de la cuenca del Ruhr por un ejército franco-belga. La resistencia pasiva alentada por el gobierno alemán y la asunción de su coste por el Estado desencadenaron un proceso de hiperinflación que puso en serios aprietos la economía alemana.

Además de las indemnizaciones, ricos territorios en yacimientos minerales y muy industrializados pasaron a manos de los vencedores

Alsacia y Lorena fueron transferidas a Francia que las había perdido en 1870 tras la guerra franco-prusiana, y una parte de Prusia fue adjudicada al recién creado estado de Polonia. Las colonias de ultramar se repartieron entre Francia, Reino Unido, Bélgica, Japón y Australia.
Estas cuestiones asociadas al fin de la guerra recayeron sobre las espaldas de los primeros gobernantes republicanos, acusados por la derecha y los militares de haber traicionado al país, asestándole una “puñalada en la espalda”.


c.- La tercera dificultad que lastró la acción de la República fue su incapacidad para granjearse el apoyo de los ciudadanos. Su marcada política industrialista le sustrajo las simpatías de los sectores agrícolas; por su parte, las clases medias, muy perjudicadas por el bache económico de la postguerra y la ulterior crisis de 1929, también le volvieron la espalda.
Un sector de la clase obrera más radical, la representada por el Partido Comunista (KPD), simpatizante con el izquierdismo bolchevique, acusó a los gobiernos republicanos en general y a los socialdemócratas en particular, de defender exclusivamente los intereses de la burguesía y protagonizó una revolución comunista en Berlín (1 de enero de 1919), capitaneada por Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht.

La revolución Espartaquista, de los partidarios de seguir la revolución bolchevique, fue duramente reprimida por el gobierno del presidente Ebert, quien se valió de la ayuda de antiguos militares imperiales y de grupos de extrema derecha. Los grandes grupos industriales y capitalistas expresaron la necesidad de un Estado fuerte capaz de garantizar sus intereses económicos y plantar cara a las fuerzas sindicales y al "peligro bolchevique".
La República se derechizó y cada vez fue más tolerante con los sectores golpistas nazis, permitiendo actuar con relativa impunidad a las milicias paramilitares de las SA y las SS.


d.- Finalmente, el crac de 1929 y la consiguiente Gran Depresión destruyeron el escaso prestigio que gozaba la institución republicana. El desempleo se cebó en amplios sectores de la sociedad, alcanzando la cifra de los casi 8 millones de parados en 1931.




El 30 de enero de 1933 Hindenburg nombró canciller (jefe de gobierno) a Hitler, que poco tiempo después suprimió la democracia y con ello la República de Weimar



miércoles, 10 de abril de 2013

RELACIONES INTERNACIONALES, 1919 - 1939


LAS RELACIONES INTERNACIONALES (1919-1939).
En este apartado trataremos el desarrollo de las relaciones entre los distintos países, casi todos europeos, desde finales de la I Guerra Mundial y hasta los inicios de la II. En este periodo de veinte años veremos dos etapas fundamentales:
1. De 1919 a 1929: de la tensión al entendimiento.
Esta etapa está presidida por el deseo de todas las potencias de buscar lo que se llamaba la seguridad colectiva, término utilizado mucho en la diplomacia de entreguerras, quiere decir un nuevo orden mundial presidido por alianzas entre las naciones que garantizasen que no se iba a repetir una experiencia similar a la Gran Guerra. La integración en pactos y tratados supranacionales era una garantía de que todos los países se comprometían en la seguridad y defensa de cada uno de los miembros ante una posible agresión, el aislamiento era el peor de los males, no garantizaba ese respaldo colectivo.
a) Los primeros años veinte: Versalles y sus efectos.
A principios de los años veinte el principal problema en las relaciones internacionales en Europa era el resentimiento y las tensiones que el tratado de Versalles generaba en Alemania. Este país no reconocía sus cláusulas y consideraba –con razón- que era una imposición abusiva de los vencedores. Aunque firmado, a la fuerza, Alemania no reconocía sus pérdidas territoriales, no reconocía la creación del corredor de Dantzig que separaba la Prusia Oriental del resto del país para dar una salida al Báltico a Polonia, ni reconocía la pérdida de Posnania que recibía Polonia, tampoco reconocía la ocupación de la Renania por parte de las fuerzas vencedoras. Ni qué decir tiene que el pago de la indemnización de guerra y los recortes militares iban parejos con el no reconocimiento de las fronteras.
El no reconocimiento por parte de Alemania del Tratado de Versalles generó en los primeros años veinte dos momentos de especial tensión.

Los sucesos de 1920.
En el año 1920 en la zona del Ruhr se decretó una huelga general por las duras condiciones de vida de los obreros y los bajos salarios; el gobierno de Berlín envía contingentes armados a sofocar la huelga. Ante esta acumulación de tropas Francia, aduciendo que se incumple el Tratado de Versalles, y de acuerdo con Bélgica, invade la zona.



En rojo Renania, zona de exclusión militar alemana, en morado zonas que siguen siendo alemanas tras un referéndum y en amarillo las pérdidas.

La ocupación del Ruhr por los franceses en 1923.
El incidente más grave entre Alemania y Francia se produjo en 1923 y duró hasta 1925. La crisis monetaria era tan fuerte en Alemania en 1923 que ese año no pudo pagar la parte correspondiente de la deuda con Francia.
Como respuesta Francia, sin el apoyo de la opinión pública y sin estar respaldada por ninguna potencia, ocupa toda la cuenca del Ruhr para cobrarse en carbón la deuda, este hecho hizo subir la tensión entre los dos países hasta unos niveles insospechados. Ante tal situación el Gobierno alemán decreta la resistencia pasiva, convoca una huelga de los obreros contra los franceses, el propio Gobierno les pagaría lo que no cobrasen por la huelga. Como reacción los franceses expulsan a los 200.000 obreros alemanes y los sustituyen por franceses. La situación es insostenible, Francia no tiene apoyos y está aislada, y el gobierno alemán no puede aguantar la sangría de tener que pagar a 200.000 obreros despedidos y no cobrar por la producción del Ruhr. Consecuencia de todo esto es que en Alemania se produce una espectacular inflación y el marco tiene que ser sustituido por una nueva moneda, el rentenmark. Al final Stresseman, canciller alemán, no tiene más remedio que ordenar el fin de la huelga y a cambio Francia espetaría la integridad de Alemania y por el Plan Dawes de 1924 aceptaría la reducción de la deuda.
Alemania estaba en cuarentena política, aislada de todos y sometida a especial vigilancia, su máximo deseo era romper el aislamiento. Lo consiguió, en parte, con la firma del Tratado de Rapallo con la U.R.S.S. el 16 de abril de 1922, sólo que la Unión Soviética era otra potencia marginada en las relaciones internacionales. En ese tratado se reconocen mutuamente y prometen neutralidad en el caso de un ataque de terceros países. Se comprometen, además, a mejorar sus intercambios comerciales y en secreto la U.R.S.S. prometía fabricar armamento para Alemania, burlando así, en parte, el
Tratado de Versalles. Por el otro lado Alemania abastecería de productos industriales a la Unión Soviética.

b) Locarno y el entendimiento.
Un cambio radical en las relaciones entre Francia y Alemania se va a producir en 1925 cuando Stresseman, ahora como ministro de asuntos exteriores, se declare a favor de aceptar por lo menos las fronteras occidentales consagradas en Versalles, es decir, la integración de Alsacia y Lorena en Francia. Ante esto Francia señala que Alemania debe respetar también las cláusulas morales y económicas del citado tratado.
En esta línea destaca la firma del Tratado de
Locarno el 16 de octubre de 1925, entre Francia, Alemania, Gran Bretaña y Bélgica. En este tratado se
confirman las cláusulas del de Versalles, ahora aceptado por Alemania con la intención de romper con su aislamiento internacional, objetivo conseguido al ser ésta aceptada en la S.D.N., el país germánico conseguía evitar la posibilidad de que se repitiera de nuevo la ocupación
del Ruhr por los franceses. Por su parte Francia contaba con el apoyo inglés en el caso de un rearme alemán. Las consecuencias de Locarno fueron muy positivas, contribuyeron a bajar la tensión en las cancillerías europeas, y un clima de concordia y colaboración reinaba en el viejo continente. Es tal su efecto que muchos hablan del espíritu de Locarno para aludir al clima de entendimiento y distensión que se respiraba en Europa.
Simultáneamente una ola de pacifismo recorría el mundo, ese pacifismo se ve coronado por la firma en 1928 del llamado pacto de Briand-Kellog, una iniciativa del primer ministro francés y del americano (de ahí su nombre) y que fue firmado por quince países, en él se condena la guerra como medio para solucionar los conflictos internacionales. Pero esto sólo era papel mojado, la nueva década traería nuevos problemas y el espíritu de Locarno quedó sólo en el recuerdo.

2. De 1929 a 1939: el camino hacia un nuevo conflicto.
La crisis de 1929 sacudió todo el mundo, y también a Europa. Ante la magnitud del drama cada país buscó soluciones por su parte, sin contar con nadie, se redujeron los intercambios comerciales y el espíritu de cooperación y solidaridad entre países de la etapa anterior desapareció totalmente. Como consecuencia de esta crisis muchos países se inclinaron por la senda del autoritarismo, y regímenes totalitarios con claros objetivos expansionistas triunfaron en el viejo continente, el ejemplo más típico es la Alemania nazi. Ante la agresividad de estos países y de Japón la S.D.N. se muestra inoperante y el sistema de la seguridad colectiva de la etapa anterior desaparece. El camino que se inicia aquí lleva directamente hacia la II Guerra Mundial.
La política expansionista de estas naciones no es frenada a tiempo ni por la S.D.N. ni por el conjunto de países vencedores en la I Guerra Mundial.

a) Las relaciones internacionales hasta 1933.
El fin del entendimiento entre las potencias se manifiesta especialmente en dos momentos: en 1931 con la ocupación de Manchuria (territorio chino) por Japón y en 1933 con el fracaso de la Conferencia de desarme. Veamos en detalle estos dos hechos.
·         En esta época Japón experimenta un crecimiento demográfico significativo y el territorio insular se le queda pequeño, eso al menos es lo que piensa el gobierno expansionista del archipiélago. Con la excusa del sabotaje chino de la vía férrea del sur de Manchuria (China) que estaba en manos de Japón, este país ocupa toda la provincia china y la convierte en un estado vasallo llamado Manchu Kuo, gobernado por un gobierno títere.
Ante tal agresión la S.D.N. se muestra impotente y sólo castiga a Japón de una manera simbólica: no reconoce la moneda del nuevo país en las transacciones internacionales. El delito ha quedado sin castigo, esto demuestra que la S.D.N. no tiene ya una fuerza disuasoria, de nada han servido los tratados internacionales. A partir de ahora los conflictos no dependerán de acuerdos colectivos sino de las decisiones y el juego de las grandes potencias.
·         Un segundo momento es el fracaso de la conferencia de desarme de 1933. Se convoca como un intento de frenar la carrera de armamentos que se está desarrollando en ese momento. Cada país propone una solución, hay tantas soluciones como países. Esto no arregla nada las cosas y al final no se llega a ningún entendimiento. La consecuencia de todo esto es que no hay ley o norma internacional que evite la carrera armamentística.

b) Las relaciones internacionales de 1933 a 1939: los pasos hacia la guerra.
El año 1933 es el año de ascenso al poder de Hitler, con su política revanchista y la promesa de acabar con el desempleo en Alemania consiguió el apoyo de un gran número de ciudadanos. Una vez consolidado en el poder se encargó de acabar con las instituciones democráticas e inició un rearme que llevaría a la II Guerra Mundial.
Pero no es sólo Hitler el causante de la guerra. Las demás potencias viendo el cariz que estaban tomando los acontecimientos en Europa se aprestaron a consolidar alianzas militares contra Alemania.
Se rompía definitivamente el principio de la seguridad colectiva que era sustituido por pactos militares entre las grandes potencias.

El viraje franco-soviético.
Tras el ascenso de Hitler Francia se siente de nuevo obsesionada con Alemania, en ese clima busca una aproximación a la Rusia Soviética, potencia con la que no mantenía ningún tipo de relación y hacia la que mostraba hasta entonces sólo signos de hostilidad.

El viraje británico o ruptura entre Gran Bretaña e Italia.
La Italia fascista inicia la conquista de Etiopía, Gran Bretaña duda, si busca el equilibrio debe apoyar a Italia para consolidar un frente contra Alemania, si busca la seguridad colectiva debe apoyar las sanciones de la S.D.N. contra Italia; opta por lo segundo y aunque al final se llegue a algún tipo de aproximación, el entendimiento es imposible.

El viraje italiano o alianza entre Italia y Alemania.
En 1934 Italia había afirmado que no reconocería nunca la anexión de Austria por Alemania. En 1936 el ambiente había cambiado, Italia estaba aislada por la conquista de Etiopía y Alemania era el único país que reconocía sus conquistas. El nuevo ministro de asuntos exteriores italiano –el conde Ciano- viaja a Berlín donde colabora con los nazis en la ayuda al bando nacionalista en la Guerra Civil Española, además entra con Alemania y Japón en el pacto Antikomintern (anticomunista), el apoyo italiano dejaba a Hitler las manos libres contra Austria, Checoslovaquia...

El viraje germano-soviético.
Si había en Europa dos regímenes incompatibles estos eran Alemania y la Unión Soviética. Stalin ante la amenaza que suponía Alemania no había obtenido ningún apoyo concreto de Gran Bretaña y Francia (el pacto franco-soviético no había cubierto las expectativas de Stalin) y no deseaba enfrentarse él solo a la maquinaria bélica alemana. Hitler si quería conquistar Polonia debía asegurarse la neutralidad rusa. Estos intereses hace que se firme el 23 de agosto de 1939 el pacto de no-agresión entre estos dos países. El 1 de septiembre Hitler invadía Polonia.

LA SOCIEDAD DE NACIONES. SDN


LA SOCIEDAD DE NACIONES

En el punto catorce de los "Catorce Puntos" del presidente Wilson se establecía la necesidad de «crear una sociedad de naciones que arbitrara las relaciones internacionales y garantizara la imposibilidad de nuevas guerras» basada en los siguientes ideales:
·          Libertad individual a través del desarrollo de las instituciones democráticas.
·          Libertad nacional a través del derecho a la autodeterminación.
·          Mantenimiento de la paz a través de un cambio completo de la organización internacional.

En la Conferencia de Paz de París se realizó el Pacto de la Sociedad de Naciones que fue incluido en todos los tratados de paz con los países derrotados. Entró en vigor el 10 de enero de 1920 [el mismo día en que entraba en vigor el Tratado de Versalles]. El Pacto de la Sociedad de Naciones, compuesto por 26 artículos, incluía los siguientes objetivos:

·          Resolver las disputas internacionales por un juez neutral.
·          Promover la cooperación internacional.
·          Asegurar el cumplimiento de las obligaciones internacionales y prever salvaguardas contra la guerra.
·          Aplicar sanciones económicas o militares a los países agresores.
·          La reducción de armamentos.

La estructura orgánica era la siguiente:

ASAMBLEA GENERAL. Integrada por todos los miembros por igual, que se reúnen en sesión anual (inicialmente la integraron 45 estados). Sus decisiones sólo serían vinculantes en caso de unanimidad. Su sede estaría en Ginebra.
CONSEJO. Compuesto por la principales potencias con carácter permanente (Francia, Gran Bretaña, Italia y Japón); cuatro miembros temporales designados por la Asamblea (en un principio, Bélgica, Brasil, España y Grecia) y los países afectados en algún problema que se tratara.
SECRETARIADO PERMANENTE. Servicio de funcionarios civiles internacional que se ocupaba del trabajo administrativo de cada día y ejercía labores de coordinación. Responsable de gran parte de las actividades de la Sociedad, cuando el Consejo o la Asamblea no estaban disponibles para ser consultados.

COMITÉS ESPECIALES creados para ocuparse de asuntos determinados como la reducción de armamento, la salud y las drogas peligrosas, las finanzas internacionales, los mandatos, la poblaciones minoritarias y los refugiados.
OIT (Oficina Internacional del Trabajo). Entidad de personalidad jurídica propia e independiente, encargada de defender los intereses de los trabajadores por medio de convenios internacionales.
Se establecía un arbitraje internacional como solución frente a la guerra en la institución del TRIBUNAL INTERNACIONAL DE JUSTICIA con sede en La Haya.

Respecto a los problemas coloniales y los territorios dependientes de los países derrotados se creó el sistema de Mandatos, como un compromiso entre los deseos anexionistas de los vencedores y el derecho de esos pueblos a su autogobierno.

Sin embargo a pesar del interés de los países miembros, la innovación en su establecimiento y sus ingentes objetivos la acción de la Sociedad estaba destinada al fracaso y su acción fue extremadamente débil debido a:

Ausencia de EE.UU. Le restó fuerza.
Entrada tardía de URSS (entró en 1934).
Salida de Japón (expulsada en 1933), Alemania (entró en 1926 y expulsada en 1933) e Italia.

Se considera que fue muy frágil por:
  • Su falta de capacidad para hacer cumplir sus resoluciones.
  • En principio no se permitió la entrada de los vencidos.
  • No se permitió la entrada a la URSS.
  • Estados Unidos no participó.
  • No tuvo alcance universal.
  • La ambigüedad de su articulado, en algún caso se llega incluso a aceptar la guerra ofensiva como legítima,

A pesar de todo lo dicho, la organización también tuvo un papel positivo:
  •  intentó erradicar las malas prácticas de las alianzas militares y la anarquía en las relaciones internacionales de antes de 1914 sustituyéndolas por una cultura del entendimiento.
  • solucionó algunos problemas internacionales y dio legitimidad a algunas acciones. 
  • intentó crear puntos de encuentro entre las naciones para la cooperación internacional, algo impensable antes de la I Guerra Mundial. 
  • fue experiencia en la búsqueda de un nuevo orden mundial, de sus fracasos se tomaría nota para la creación tras la II Guerra Mundial de la O.N.U., que en muchísimos aspectos es su continuadora. 



A la S.D.N. se le dio el control de la ciudad libre de Dantzig, el Sarre, las antiguas colonias alemanas y los territorios desgajados de Turquía, si bien estos últimos fueron entregados como mandatos por la organización a Gran Bretaña y Francia.
En el desarrollo de esta Liga de Naciones distinguimos dos momentos: el primero va de 1924 a 1929, es la etapa de plenitud de este organismo internacional; el segundo momento es su declive, de 1929 a 1939, el militarismo expansivo de varias potencias rebasan a la organización y ésta no puede evitar, al final, la guerra.


APOYOS.

Pacto de la Sociedad de Naciones.
“Preámbulo. Las altas partes contratantes, considerando que para fomentar la cooperación entre las naciones y para garantizarles la paz y la seguridad, importa: aceptar ciertos compromisos de no recurrir a la guerra mantener a la luz del día las relaciones internacionales, fundadas sobre la justicia y el honor; observar rigurosamente las prescripciones del Derecho internacional, reconocidas de aquí en adelante como regla de conducta electiva de los Gobiernos; hacer que reine la justicia y respetar escrupulosamente todas las obligaciones de los tratados en las relaciones mutuas de los pueblos organizados, adoptan el presente Pacto, que instituye la Sociedad de Naciones.
Artículo 10:
Los miembros de la Sociedad se comprometen a respetar y a mantener contra toda agresión exterior la integridad territorial y la independencia política presente de todos los miembros de la Sociedad. En caso de agresión, de amenaza o de peligro, el Consejo determinará los medios para asegurar el cumplimiento de esta obligación. (...).
Artículo 16:
1. Si un miembro de la Sociedad recurriese a la guerra (...), se le considerará ipso facto como si hubiese cometido un acto de guerra contra todos los demás miembros de la Sociedad. Estos se comprometen a romper inmediatamente toda relación comercial o financiera con él, a prohibir toda relación de sus respectivos nacionales con los del Estado que haya quebrantado el Pacto y a hacer que cesen todas las comunicaciones financieras, comerciales o personales entre los nacionales de dicho Estado y los de cualquier otro Estado, sea o no miembro de la Sociedad.
2. En ese caso, el Consejo tendrá el deber de recomendar a los diversos Gobiernos interesados los efectivos militares, navales o aéreos con que los miembros de la Sociedad han de contribuir, respectivamente, a las fuerzas armadas destinadas a hacer respetar los compromisos de la Sociedad (…).
4. Todo miembro que se haya hecho culpable de haber violado alguno de los compromisos de la Sociedad podrá ser excluido de ésta. La exclusión será acordada por el voto de los demás miembros de la Sociedad representados en el Congreso (...).”
La Sociedad de Naciones. Preámbulo y artículos.